sábado, 9 de agosto de 2008

El mar se agita en mi corazón

La tormenta
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]

una tormenta siniestra llega en el cielo, con nubes cargadas de miradas negras, miradas de almas malditas, bajo su sombra se marchitan sueños, se arrastra sobre campos y ciudades, como una enfermedad, cubre de mala sangre las cabezas de la gente, llena sus ojos de visiones trágicas, la locura pisa fuerte y aplasta edificios, se exprimen los automóviles bajo sus pies, mucha suciedad se esparce en el aire, es una asfixiante niebla, y todas las caras del terror giran alrededor, mientras nos quebramos por dentro, caemos de rodillas y derribamos la apagada mirada al suelo muerto.

La bestia
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]

se me parte la espalda encorvada, siento cómo se rasgan mis vestidos y se desase la piel, los huesos estallan, la carne se destroza, emerge bajo mi nuca una bestia, una gigantesca criatura, mientras grito de dolor, arrojado sobre la tierra; el demonio se eleva con su largo cuello, expande sus alas enormes, salpicadas de sangre, de su hocico cuelgan bigotes humedecidos, de sus fauces escapan humos y fuegos, sus grandes ojos rojizos se mantienen cerrados hacia el cielo, se rodea de un aura infernal, el dragón de odio y rabia que llevo dentro se desata, prorrumpe su rugido atronador, envuelto en llamas y humaredas rojizas, y finalmente yo caigo inconsciente sobre mi rostro.

Una ocasión
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]

quisiera que me saques a volar, que me lleves tan lejos, olvidarme de quién soy, no estoy seguro de lo que siento, quizá sea mejor persona al final del día, solamente me veo atrapado, con mis temores y debilidades, y mis fortalezas, todo lo que nadie sabe, lo poco que necesito para vivir, me retiro a mis sueños, con una tristeza nueva en las venas, quisiera verte otra vez, volando entre los ángeles, jugando bajo las nubes de otoño, desearía que me sonrías, que me salves.

El mar se agita en mi corazón
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]

el mar se agita en mi corazón
las tempestades que me sacuden
los vientos y el oleaje prisionero
me convierten en un náufrago personal
sobrevivo a mis propias emociones
de retorno a la isla solitaria
al sitio más alejado del mundo
donde un paraíso florece íntimamente
donde me quedo horas en la orilla
pensativo aunque sin ningún pensamiento especial
observo el horizonte
confiando en que me rescatarás alguna vez.

Relato de un descubrimiento
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]

descubrí tendencias suicidas, había un cable detrás del televisor, justo cuando sonó la explosión, a pocas casas de aquí, alguien que cortaba verduras dejó de cortarlas, otro que miraba álbumes de fotos se distrajo, mientras un desconocido corría arrepentido, todos fueron absorbidos por la sorpresa, salieron de sus hogares, se pararon frente a la puerta, debajo de ella salía un fino hilo de humo, y avanzaba una oscura mancha.

El día más feliz, y triste
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]

el día más triste de mi vida fue también el más feliz, esa mezcla de amargura y asombro, esos ojos deliciosos que me desgarraban,

La niebla
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]

se dispersa en el vecindario, ronda detrás de los árboles, va apoderándose de cada

Sirva de ilustración
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]

te invade la emoción, la tinta de las paredes parece fresca todavía, relucen los cristales ante el sol de la mañana, las veredas lucen limpias, los árboles se mecen dormidamente, casi como las pequeñas flores en el jardín, a los lados del sendero, tu auto brilla en la cochera, las tejas son más anaranjadas, tienes una bonita casa nueva, te mudaste a un sitio tranquilo, no hay nada de que quejarse, todo es perfecto, excepto que no tienes vida, apenas eres una pintura, la caricatura feliz en un panfleto publicitario.

Un jardín en el corazón
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]

ideas, qué estupidez pensar sobre posibilidades, cosas y sueños, siento tanta decepción, imagino paisajes, son hermosos momentos, como si tuviera un jardín en el corazón, pero todo se corrompe, se distorsiona la maravilla, los mágicos colores se tornan lúgubres,

Universo personal
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]

no comprendo cómo se formó mi personalidad
es tan desalentadora
un subir y un bajar por la línea de la autoestima
cierta vulnerabilidad que acrecienta exigentes reproches
un día todo se derrumba
se pierden todas las emociones para siempre
el recuerdo parece sintonizado con una señal invisible
de la historia y el curso paralelo de los eventos
el empequeñecimiento de una milenaria cultura acontece en un mínimo instante
se aplastan tantos avances y responsabilidades
ante la mirada profunda en un universo ignorado
qué poco somos
por mayor empeño que hagamos
seguirán siendo nuestras obras parte de una insignificancia eterna.

Fantasmas
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]

posa la mano sobre el respaldo del sofá,
en realidad no existe esa mano,
es también cierto que aquel sofá ya no existe,
la casa vacía tiene un pasillo
que conduce a un patio trasero,
la puerta tiene candado
pero se abre al empujarla;
en la calle no hay correo postal,
los vecinos no tienen apellidos,
al caminar ya no se miran,
los ojos carecen de colores,
mientras la imagen de un hombre cansado
se refleja en el picaporte de un coche,
se sumerge en su tristeza,
en un río de gente silenciosa.
* Opino que este texto puede combinar con "Claro de luna" de Beethoven como fondo musical.

Madurez anticipada
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]

Me dijeron que, pese a mi juventud, aparentaba tener al menos cinco años más, por causa de una serenidad metódica y una seriedad quizá impropia todavía para mi edad. Me calcularon, entonces, la extensión de vida hasta el nivel en que los hombres se supone que alcanzan su máxima madurez. Tal vez haya madurado antes. Ahora cada vez será un mayor desafío, las puertas hacia un rumbo cualquiera se definirán en esta década. Quizá termine otro calendario sin valor, decida arrojarme al mar, en un viaje por tierras impensables para mi apellido, en un pretexto ambicioso por huir de la biografía olvidable y acomodaticia. Tengo el poder de otorgar eternidad con mi pluma, pudiera terminar este vuelo fuera de las tinieblas para alcanzar una luminosidad que brille más allá de mi fin.

Previsión de estrategia
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]

»la próxima vez que te vea voy a animarme a todo
vestiré mi mirada más atrevida y dulce
romperé mi piel de hielo
me entregaré a las locuras más temidas
cuando te encuentre diré qué me provocas
en qué pasión se me consume la fantasía
voy a tentarme a todos los sabores de la confesión
y te diré cuánto quisiera abrazarte
embriagarme en tu boca brillante
sentir en tus labios una sonrisa cómplice
y animarme a llevar contigo este crimen solitario
al estado de sociedad delictiva.«

Vergüenza propia
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]

me siento avergonzado
cuando me descubro estupefacto
por algún film o novela
es tan lejana esta situación
cuando miro al cielo estrellado
veo las luces de una avenida al amanecer
con el aliento formando humos de frío
es tan curioso
sobretodo cuando me miras
estoy tan perdido
quisiera desaparecer
porque no resisto a tu sonrisa
porque me quedo observándote
ya no puedo simular la admiración
si al menos fuera un sueño todavía
podría estar a tu lado todo el tiempo
sin sufrir este miedo hacia tu amor.

Maravilla
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]

la semana terminó junto con la desesperación
esas emociones desconocidas desfilaron en mi corazón
pese a todo lo que he aprendido
estas sensaciones me parecen nuevas
que me confunden tan íntimamente
voy dando pasos entre las paredes de mi vida
cuando siento algo en la mano
abro los dedos y descubro un picaporte
alguna puerta surgió ante mis pasos
las páginas que creí perdidas regresan de pronto
leo en mis pensamientos esos detalles tan insignificantes
todavía capaz de cautivarme por el recuerdo
así, al sentir algo en mis labios
abro los ojos y descubro
que la cantante me ha besado.

Acusado
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]

alguien se ha quedado atrás de todos,
el único testigo de una infidelidad,
o el solitario sobreviviente a una mentira,
nos vamos a lavar las manos en su inocencia,
nuestra culpa caerá sobre su cabeza
como una guillotina por sorteo,
el juicio será una farsa sin acusados ni jurados,
y su condena el olvido de nuestro crimen.

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