miércoles, 16 de julio de 2008

Una forma más de ceder a la locura

Nada
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
Nada, mientras sigas
hablando de mares y tormentas
noches y ciudades sombrías
con sus fantasmas, las decepciones
Nadie, un segundo
los crímenes de lejos
Algo, un espejo roto
Todo, corazón, amarte.

Poco
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
Tu voz, aunque diga poco
"¿sabés manejar?"
"¿ahora qué hacemos?"
imagino que me llevará lejos
me figuro una ocasión
susurrándote a medio sueño.
Una delicia próximamente...

Sobrevuelo
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
Las cargas antiaéreas estallan a pocos metros
por debajo de los aviones
los picos de las montañas se detienen a escasa distancia
sus laderas se derrumban en el vacío
es un alto vuelo
en la punta de las alas se acumulan hilos helados
siento cómo mi corazón se convierte en piedra
que llevo un peso que me hace fluctuar
hay una ruta en el cielo
un sendero sobre las nubes
donde las plumas no pueden derretirse
donde la travesía no amenaza con evaporarse
camino sobre una altura invisible
mis pasos son arrastrados en el viento
siento que mi me mente se enciende
desliza pensamientos incoherentes
que estallan detrás de mí
sembrando columnas de humo
hongos incandescentes.

Desbordamiento
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
El río lleva una sábana
se agita como bailarina fantasma,
se lleva un leño
un nenúfar despedazado
la corriente roba un brazo de plástico
las cercenadas tripas
nada sin voluntad la botella
también el frasco de gasolina,
el río lleva un abogado
una niña
una vaca
la celeste camisa flota en la superficie
la corbata se enreda hacia el fondo,
no hay medida.

Almuerzo servido
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
La comida estaba servida
los platos puestos ante cada silla
los utensilios en cada lado
las copas alrededor de la jarra
los panes cortados en la canasta
hasta habían servilletas
la mesa estaba puesta
cubierta por la quietud
como una obra que aguardaba en la galería
no ascendía el vapor de los bocados
hacía horas que el comedor aguardaba a los comensales,
no llegarían nunca.

Posesivo
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
No te tengo
No tengo un arma para volarme los sesos
Tampoco una respuesta para todas las preguntas
¿Qué es lo que tengo? Veo la hora
Puedo quedarme sentado sin hacer nada
Observando cómo el mundo gira sin mí
Mañana faltará alguien
Yo sé, conozco la dirección
Quizá pueda enviar una carta en blanco
Lo sé, ya te perdí
En este siglo en que vamos a ser sepultados.

Insomnio
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
Duele el intento del sueño
arden los ojos dentro del afiebrado cráneo
que vengan las voces que me dicten las palabras fuera de la cordura
la ventana hacia el cielo se abre como un pozo
quisiera elevarme hasta el fondo
estoy tejido por pequeñas conspiraciones
por pesadillas destrozadas en el suelo de mi mente
el escarceo entre los vidrios y los ahogos
la sustancia de la noche inunda a la ciudad
es posible irse tan lejos
sin abandonar esta habitación
sin levantarse ni abrir la cortina.

Volviendo al hogar
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
Continúan cambiándose las luces de un semáforo
en las solitarias calles de la madrugada
se escabullen las jaurías en las esquinas
asolando las bolsas de la basura
misteriosos perros se disputan lo que queda de la noche
un hilo de sangre se desliza de la nariz
escucho mundos contrarios en los oídos
un aire de perturbación recorre los árboles
alguien vacía una escopeta tras las hojas.

Eclipse
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
Las luces de los automóviles se quiebran en la curva,
cada día miré a la luna
al principio las apariencias fueron desfiguradas
no había nadie dentro de la casa
siguieron los días tan extraños
con sus furias y penas desorbitadas
algo empezó a invadir
una niebla siniestra que crecía
podía sentir el cambio
veía en las sombras, tras los árboles
oía el aleteo imperceptible
me estaba acercando a la escena del crimen
el eclipse estaba sucediendo.

Ficción recargada
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
Hace un tiempo concibo un personaje
no consigo expresar su verdadero perfil
tengo fragmentos de sombras
estoy viviendo la vida de mi creación
soy apenas el sueño de una existencia imaginada
no encuentro la liberación de la escritura
por lo que me asedia la realidad.

Reprimirse (acerca de)
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
Volvemos al cielo tormentoso
volvemos los que hemos pecado
no sé por qué siento que los decepcioné
pareciera que están hablando de mí
el rumor se escabulle entre truenos
a pesar del gorjeo y la intermitencia
lo que ha reprimido mis emociones
desatando visiones que no están ahí
insectos y manos que escapan de la realidad
cuántas capas de nubes para atravesar
un precipicio entre los riscos sombríos
para alcanzar el sosiego invulnerable.

Cielo de sangre
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
El cielo se llenaba de sangre
la muerte trepaba por las venas de las nubes
pero no eran las nubes que estaban heridas
tampoco eran los pájaros
que en tierra observaban atolondrados
al lado del compañero fallecido
ni siquiera era el puñado de rosas
que quedó pálido y marchito
ni la luna arrancada del lecho de estrellas
el sangriento firmamento iba apoderándose de nuestro miedos
mojaba con su sombra cada ruego musitado en penumbras
cada desfallecimiento desprendido del cortado corazón
el cielo se llenaba con la sangre de los suspiros
de los quejidos de una alma por otra
en la desgarradora visión de su propia incertidumbre.

Alas de cera
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
Cual rubia encarnación
que arroja su luminosa sombra
sobre la mar de abatido latir
su mirada se ciñe como filo
en los senderos del cielo
caigo muy malherido
confundiendo el sentido
la cera de mi imaginación
se derrite al querer tocarla
funde las alas de mi corazón
por acercarme tanto
caigo muy malherido
de espaldas hacia el vacío.

Foso
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
Te decepcioné, ¿verdad?
Estoy seguro que fracasé en tus expectativas
Debe ser algo en mi forma de hablar
Quizá en la percepción de las cosas
¿Cuánto falta para perderlo todo?
Cuántas veces debemos hacer lo mismo
Girar solitariamente en esta humanidad
Sin poder reconocernos en otra mirada
Incapaces de oírnos en la voz indicada
Tratando cada vez de rompernos la piel
Impregnando huellas a nuestro paso
Hay algo que no puede funcionar bien
Los que van adelante caen en un agujero.

Esplendor
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
Hermosa noche purifica la luna
Con lumbre de sangrientas civilizaciones
Eclipses y estaciones invernales
La ventana la retiene frágilmente
Esto tampoco tiene sentido
La bestia interior que desnuda el arte
Muerde con mayor intensidad
Este dolor que infecta el alma;
Su fulgor sostiene mi oscura mirada
El tiempo peregrina hacia la eternidad
Me quedo pensativo a un lado de nada
Qué quebradizas son las cosas en la realidad.

Tan breve
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
Tan breve es el amor como la noche
los deseos se disuelven como los sueños
la pasión se rompe con el rocío del alba
cuyo reflejo demuestra la ausencia y el silencio
imaginamos que alguien nos pueda acompañar
que existen delicias junto a otra sombra
ofrecemos lo mejor a quien nos desconoce
hasta quedarnos con un vacío y pena
qué es esta destructiva locura
cerramos los ojos a una reciente temporada
esperando aliviar el corazón con otras emociones
qué intercambiables somos al olvido.

Ascensión
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
Colapsó el trueno tan cerca de mi sueño
que del techo se desbarrancó polvo virgen
el oro muerto del fuego se derramó del cofre
el agua fría del espejo lanzó mi sombra hacia la noche
pero hay una ventana iluminada a través de la tormenta
que conduce a la serena siesta del erotismo
asciendo por la frágil escalera de la inconsciencia
aún no cierres el ojo, que si llego tarde
podría equivocar el beso y morir en una belleza
que no es pura ni eterna.

Una forma más de ceder a la locura
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
Una forma más de ceder a la locura
esto que estoy haciendo cuando no soy yo
cuando extraño y me siento más perdido
aunque ésto sería parte de otra historia.
Es extraño que nadie me llame por mi nombre
que nadie me recuerde cuando dejo de escribir.
Ella dirá a su amiga que la estoy observando
acerca de la falta absoluta de sentido en la vida
mientras el tiempo disminuye
la posibilidad de ingresar en la eternidad.
Puede ser que algunas cosas no sean apropiadas
que una huella encaje en la mano de alguien
que ya te ha olvidado.
Vamos a participar de una acción dolorosa
que no sea normal hablar en este momento.
Y qué voy a hacer con mis ojos
llevó en ellos miradas que no desaparecen
la sonrisa que se distiende cuando se apaga
lo que no saben los espectadores de cierto
por eso no quiero decepcionarte, de nuevo.

Poeta
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
El corazón se precipita a un amor sin fortuna
en la noche aparece una triste silueta
que se funde con el vacío de la oscuridad
con su mirada esquiva, teje una agonía
con el verso equivocado cae, desfallecida
sabiendo que ha perecido otro poeta.

Escena de la bella durmiente
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
En los corredores transita la lumbre cortada
de las velas que miran por viejas ventanas
por debajo duermen bueyes, perros y flores
sin atender el suave murmullo de un llanto
Danzan las sombras de quietas apariencias
en las paredes cuya luna ha enceguecido
Mientras ella parece dormida y delicada
en un lecho custodiado por sus doncellas
pero no es el sueño que duerme en sus ojos
ni son las penas acariciadas por el futuro
Cómo brilla el níveo fulgor en su rostro
como si flotara en su vestido de prometida
el intenso deseo se dibuja en sus labios
a través de un estigma de reencarnación
pudiera levantar los párpados de pronto
levantar la mano y pedir la rota copa
agitar el pecho en un suspiro secreto
acomodar un pie y el otro, desnudos
para desprenderse al borde del balcón
mirar el campo gigante de la noche
con sus ojos hambrientos de sueños
y entonar una canción que se olvida
Más, yace en el centro del recuerdo
profanada por voces que la llaman
por corazones que duelen la tristeza.

Cuestionamiento
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
Qué es lo más importante para mí
me preguntas, cuando voy perdiendo
mi corazón se parte en muchas aguas
aislándome entre varias identidades
pero no me reconozco, aún en tus ojos
nada puede quitarnos esta fortuna
que se va marchitando, por mi culpa
no estoy seguro de lo que vendrá
en la continuación de nuestras vidas
en algún momento te responderé todo.

Instante perdido
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
En cuál instante se perdió mi corazón
alejado en vientos y lluvias repentinas
entre versos que fueron insuficientes
meciéndose en intempestivos océanos
en brazos de sueños, malos recuerdos
mi voz que se quiebra en el silencio
o estos labios que olvidaron besarte
Qué te regresa ante mi desolación
erige tu mirada a pesar del llanto
tu palabra ausente, siempre ausente
en el instante en que te voy a perder.

Estado catatónico
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
Nada se mueve en estas circunstancias
distancias, distancias llenas de quietud
un largo día que se quiebra en el fondo
donde yacen perecidos los días pasados
Quizá el día bendito de tu primer beso
o aquel en que supe que no sobreviviría
en el lugar ubicado hacia una ventana
Lejos, kilómetros de nada, de vacío
sin árbol ni ave, ni lago, sin invierno
sólo el leve latir del pensamiento
invadido por los frágiles murmuros
de las ánimas que no pudieron arder
Ninguna voz, espacios de silencio
inmensos espacios sin nada que decir
sin absolutamente nada que maldecir.

Rato
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
Despega un avión hacia un país sitiado
entrega un cartero un sobre extraviado
llueve en un miércoles que fue funesto
La noticia que mañana será inútil
es corregida en pruebas ineficaces
medida, cortada, reseñada para nada
mientras me dirijo hacia el puerto
los impresores duplican la edición
las páginas intercaladas y apiñadas
enseguida transportan las entregas
mientras miro el horizonte muerto
mientras estás dormida en tu cuarto
a pocas horas de lanzar el periódico
que sea leída la funesta decepción
mientras llega el amanecer final.

Mala suerte
(Carlos Miguel Giménez O.) [cmgo1979@yahoo.com]
El fracaso me escoge entre las llamas
soy señalado para asumir una misión
La decepción me busca en tormentas
me lleva a seguir unos rastros vacíos
La frustración me quita del tiroteo
asumo posición en un teatro arruinado
El desengaño me salva de la explosión
me guía por trincheras de escombros
El infortunio me ve desde su posición
entonces caigo abatido por un error.

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