miércoles, 29 de diciembre de 2010

en vivo desde la rutina







en vivo desde la rutina

nos vamos a volver locos
necesitamos que un día sea igual a otro
que los cambios sucedan paulatinamente
que esta mañana no sea desaforada

Ж Ж Ж

si cada día fuera una aventura
un día nuevo diferente e incierto
nos volveríamos locos
al no tener un sistema de costumbres
al que se aferre nuestra percepción

Ж Ж Ж

todos los días que te veo son los mejores días aunque sean los peores
todos los pensamientos que se interrumpen ante tu sonrisa
la posibilidad de que sea el momento esperado
toda una población asimilando la libertad
mil millones de cajeros automáticos
millones de buses cambiando de turno
los fabricantes de ataúdes y de botones
porteros que cambian las luces que nunca se apagan
mucamas que arreglan habitaciones piso tras piso
apicultores que adulan a la abeja reina

Ж Ж Ж

ahora empezó a llover
los coches transitan muy despacio
vibra la casa y suena el trueno
un chorro de lluvia puntea el tendido eléctrico
yo no voy a decir mis secretos
me voy a mezclar en el brindis
a mimetizar en la mirada más sociable
todo ha sido una preparación para el siguiente paso
tantos años de construcción geométrica
de servir al emperador siendo su verdugo
ignorando que el corazón es un arma
que las ideas son los virus más letales

Ж Ж Ж

toneladas de periódicos financieros se dejan en los trenes
una foto se recorta y se pega en una pared
al completarse el crucigrama se tira a la basura
la próxima comida vamos a recordar mejor el chiste
mientras el presentador cuenta un inmediato gag
50 millones de personas se ríen al mismo tiempo
podría inventar una escena hoy mismo
que en siete décadas sería tema en un café
probablemente ya estaríamos muertos
e inutilizado este amor

Ж Ж Ж

me gusta mirar por la ventana
los autos nunca llegan siempre van
a la izquierda se refugia un nido de tormentas
entre los vientos que mecen los árboles
cada noche pierdo la batalla de la noche
apago todas las luces y miro la calle vacía
mañana me voy a cortar el cabello


he dejado de escribir

has dejado de escribir
me susurra un viento arrugado y enfermo
en un campo posiblemente haya muerto a un agricultor
pero sostengo una postura estoica para ocultar la verdad
(la verdad es que todo es mentira)
porque las voces siguen rebotando alrededor del planeta
y solo a veces se fuga una frase hacia el exterior
que si no arde ante el sol se vuelve extraterrestre
porque sé que el suspiro final esquiva la clorofila
nadie quiere ser planta ni pensar demasiado
eso saben los memoriosos animales ciegos
que sepultan sus huesos en el vientre de la arena
en el arte de tejer las almas
el clima se despreocupa de toda supervivencia
como el vecino tosco que prefiere una escopeta
yo he vuelto a escribir
sin llamarle a mi amor por su nombre
en un idioma trascripto por el silencio
cuando todos duermen en un avatar en desventaja
tanto que podría besarla a ella en el instante
y el tiempo atesoraría un misterio innecesario


natalie portman, mi vecina

quizá un día descubra la palabra inexistente que nos vuelva locos
aquella capaz de provocar epilepsias masivas y sentimientos encontrados
mejor así porque quiero pasar algunas tardes en alguna playa
convertirme en el propietario de un gigantesco jardín abandonado
desde mi abandonada pared de castillo
mientras tanto la bipolaridad es insuficiente
porque mi personaje exige una universalidad de matices
una pluralidad de prejuicios y contradicciones
sobretodo la furia
que la oscuridad albergue mi mirada


cómo reinar

estábamos flotando bajo el agua
golpeados por un viento ahogado
estaba pensando en nada
inspirándome de la nada
extrañando algún fondo posible
para construir un nuevo raciocinio
para armas una lógica extinguida
quise rescatar una iconografía funesta
dormir a una bestia más temible en un corazón innato
ocultando el ritual en un recuerdo profundo
estaba por besarte ante el muro de parlantes
cuando el gran ruido nos separó
desde entonces este corazón alberga la penumbra


http://www.hayatvar.com.tr


condenados al sentimentalismo y la sensiblería de la existencia ciudadana

muchas veces siento que me estoy convirtiendo en estatua en un universo tedioso y ordinario
como si fuera náufrago en una ciudad calculada y trajeada
entonces es necesario huir clandestinamente hacia las tinieblas
hasta encontrar las sombras que encajen con la esencia salvaje de uno mismo
en ese territorio infinito y secreto del yo interior
&&&puente&lineal&&&
si ningún amor me satisface, es porque percibo que un masivo sistema de reacciones emocionales está suplantado en cada mujer, inconsciente de ese mecanismo absurdo y reiterativo
todos juegan un papel absurdo, sueñan con idénticas ilusiones destructivas, y asumen el dolor como un acto de heroicismo patético delante de la fantasía emperatriz de la nada, que es la felicidad social

lunes, 20 de diciembre de 2010

Un día de campo


Un día de campo
Por Carla Gabriela

Un día en la casa de la familia González estaban preparando una rica comida llamada hindú, la comida es de la India y a esa familia le gustaba mucho comer comidas de otros países, y ese mismo día fueron a un día de campo, fueron: la mamá Susi, el papá José, y los hijos Lusía, María, Brenda, Matías y Laura.
Llevaron para comer la comida hindú, tallarines con papas, asado con mandiocas, pollo al horno, milanesas, pizzas y de postres helados, frutas, tortas, etcétera, y de ahí fueron a la casa de la abuela Beti y de ahí al parque y a muchos lugares más pero ellos dijeron que es una aventura en la familia pero en un día para el otro fue total mente diferente empezaron a discutir entre sí pero Lusía y Brenda nooo pero escaparon de ahí para no escuchar discutir a su familia ya que estaban acostumbradas a estar normal pero al oscurecer en el bosque era muy peligroso para las dos niñas y empezaron a escuchar ruidos y voces muy extrañas que no se escuchan hoy en día, pero las dos niñas se refugiaron en el hueco de un árbol y la niña Brenda que tenía fama de madrugadora se quedó despierta toda la noche cuidándole a su hermana de accidentes. Al día siguiente Brenda amaneció totalmente dormida, y su hermana Lusía la trataba de despertar pero no reaccionaba hasta que Lusía la dejó solaaaa en el bosque.
La familia después de tanto pelear se dieron cuenta que faltaban dos niñas que eran Lusía y Brenda, salieron preocupados a buscar pero no hubo respuestas, buscaron por todos lados hasta que una parte nada más faltaba y era el bosque y empezaron a buscar.
Matías preguntó ¿por qué no nos separamos así puede ser que las encontremos más rápido? Y contesta María sí es una buena idea pero si algunos de nosotros las encontramos como nos comunicaremos pues tenemos que reaccionar. María piensa en algo útil, mamá tú en algo que llevar para no morir de hambre, Laura tú estarás con mamá porque eres chica aún, papá tú piensa cómo salir de aquí y yo estaré buscando a mis hermana pero tenemos que inventar un teléfono celular.
Brenda, saldremos despierta por favor no me siento bien presiento que nos va a pasar algo pero muy malo con mala onda despierta Brenda y le contesta a Lusía no digas mentiras sabes que no te voy a creer así que ponte con las pilas bien puestas que vamos a volver a casa y Lusía dice que no puedes ser así sabes que cualquier cosa nos puede pasar y lo sabes bien o estás loca.
Matías tiene respuestas y avisa la familia gritando por el bosque diciendo tengo respuestas, tengo respuestas, y lo repetía una y otra vez y hasta que no volvió a ver a su familia y él se quedó muy soloooo toda su familia había desaparecido y se puso muy triste y nadie volvió a aparecer.
Y muy triste trató de volver a su casa pero no pudo y pregunta ¿qué hice para merecer esto no puedo estar sin mis hermanas sin mis padres soy solo un pobre joven sin su familia?
Lusía y Brenda seguían tratando de poder salir del bosque pero una vez que entras en ese bosque ya no salís te quedas para siempre y perdés todo lo que más querés en especial a tu familia decía Lusía y contesta Brenda que lo que decís Lusi no digas cosas que no son ciertas pero después vas a comprender Brenda y vas a ver. Los padres de los chicos perdidos estaban desesperados por querer volver a verlos la mamá llorando diciendo por qué los deje ir por el bosque si sabía que iba a pasar esto. Laura y Matías también estaban con mucho miedo como los otros.